NOTA HISTÓRICA: El coche eléctrico para reparaciones de la línea del Ferrocarril del Carreño fue un antiguo vagón construido en 1910 por la Sociedad Española de Construcciones Metálicas de Beasain y transformado en los Talleres de Candás en 1945 en una especie de dresina, dotándolo de una caja casi nueva, con ventanas en el habitáculo central y en ambos extremos dos balconcillos para carga, un pantógrafo y un motor eléctrico que atacaba por engranajes a uno de los dos ejes, siendo su longitud de 6.100 mm y su altura de 2100 mm. Fue desguazado en 1990.