Vista general del vagón, que pertenecía a un grupo de material móvil de procedencia alemana, fabricados específicamente por la empresa alemana SOFINDUS (Sociedad Financiera Industrial) para circular en régimen de alquiler por la península ibérica como vagones de propiedad particular a todos los efectos, y que había estado operando en el sur de Francia, pero que a consecuencia del desarrollo de la Segunda Guerra Mundial y del cierre de la frontera española, se había concentrado en la playa de vías de la estación de Irún, y finalmente, al no poder ser repatriados en 1945, Alemania decidió ofrecerlos en venta a la recién creada RENFE, adquiriéndose a un buen precio y adaptándose al ancho de vía español