Área de identidad
Código de referencia
Título
Fecha(s)
- ca. 1ª mitad s. XX (Creación)
Nivel de descripción
Unidad documental simple
Volumen y soporte
1 Tarjeta postal. Dimensiones 90 x 140 mm. Soporte en papel. Color. Orientación horizontal
Área de contexto
Nombre del productor
Historia biográfica
Nombre del productor
Historia biográfica
Nombre del productor
Historia biográfica
Institución archivística
Historia archivística
Origen del ingreso o transferencia
Compra realizada en fecha 08/02/2006
Área de contenido y estructura
Alcance y contenido
Vista general de la estación Restaurant Eléctrico en la que se puede observar a la derecha de la imagen un tranvía además de que en la parte inferior izquierda se puede localizar a un grupo de viajeros dirigiéndose a la estación.
Valorización, destrucción y programación
Acumulaciones
Sistema de arreglo
Área de condiciones de acceso y uso
Condiciones de acceso
Condiciones
Idioma del material
Escritura del material
Notas sobre las lenguas y escrituras
Características físicas y requisitos técnicos
Buena
Instrumentos de descripción
Área de materiales relacionados
Existencia y localización de originales
Existencia y localización de copias
Unidades de descripción relacionadas
Área de notas
Notas
NOTA HISTÓRICA: En 1905 llegaba el tranvía eléctrico a Vallvidrera. En 1906 se inauguró el funicular de Vallvidrera, el arquitecto del proyecto de las estaciones fue B. Conill. En 1907 Heribert Alemany pidió permiso al Ayuntamiento de Sarrià para establecer un tren por la mina que conducía el agua de Vallvidrera a Sarrià, el Mina-Grot, que serviría de medio de transporte para llegar a la zona del pantano desde el pie del funicular. El señor Alemany quería crear una zona de esparcimiento y atracciones en la finca llamada de Can Sibina, propiedad, entonces, de Ramon Miralles, frente al pantano y entre Can Llavallol y Mas Sauró. El 13 de junio de 1908 entra en funcionamiento el tren de la Mina Grott en Vallvidrera, que estará en servicio durante dos años. El parque se llamó “Lake Valley”, donde parte de la atracción consistía en la iluminación de la gruta dentro de la cual corría la vagoneta, con capacidad para 32 personas. El proyecto ofrecía, también, la iluminación del bosque y de Can Canut, estableciendo unos itinerarios con bancos para descansar y “trotoirs roulants” para circular. Hacía poco tiempo que la iluminación eléctrica se había instalado en la zona y ver los paisajes de siempre iluminados con luz eléctrica ofrecía, de por sí, una atracción. Por la misma razón el restaurante Eléctrico, de 1912, presentaba la misma satisfacción y así se ofrecía en su propaganda.
Notas
Tarjeta postal coloreada.