- ES 28079. AHF D-1-2-1-2-PHO-0002-0027
- Unidad documental compuesta
- 2002-09-06
Parte deColecciones
RESUMEN DE LA ENTREVISTA:
Rafael Vela Navarro nació el siete de mayo de 1928, en Santa Cruz de Múdela, en la provincia de Ciudad Real. Está casado y tiene un hijo. Su padre era mozo de agujas en la estación de Linares-Baeza y su hermano también desarrollaba labor ferroviaria.
Comienza describiendo su trayectoria profesional. No asistió durante mucho tiempo a la escuela de MZA debido a que pronto comenzó la Guerra Civil Española, y tuvo que abandonar la estación junto con su familia debido a los bombardeos, y en cuanto la Guerra termina regresan. Después de la Guerra, alrededor de 1942, ingresa en RENFE como peón de la CNS y el ocho de agosto de1945, debido a la escasez de personal, ya como factor con una brigada a su cargo. A lo largo de su vida pasa por diferentes destinos hasta volver a la estación donde nació. Durante todo ese tiempo, ha vivido en diferentes lugares para promocionarse profesionalmente, relatándonos su vida en los poblados ferroviarios.
Vive en Linares-Baeza hasta que se casa en 1958, y es cuando abandona la casa de sus padres para trasladarse a la vivienda de RENFE en Calancha. Más tarde, solicita como destino Vilches, y le es concedido. Después Torreblascopedro, y alrededor de 1965-66 es cuando retorna a Linares-Baeza, excepto un pequeño periodo en el que fue destinado a la refinería Calvo Sotelo. Debido a los enfrentamientos con el jefe de estación, lo devuelven a su destino como jefe de estación, y se jubila poco después a fines de 1984. Afirma que la vida en los poblados era buena para los tiempos que corrían. Las viviendas contaban con un inodoro, pero no lavabo ni bañera. Las casas tenían habitaciones pequeñas, pero cubrían sus necesidades. Contaban con electricidad pero no agua potable, ya que recuerda que salía todos los días un tren de la estación de Linares-San José para llenar la cisterna, y una vez de vuelta se repartía por el poblado. En cuanto a los servicios, en algunos poblados tenían médico, farmacia y tienda de comestibles. Otros no tenían nada de esto, y sólo disponían del tren del economato o ni siquiera, y tenían que pedir favores para que les enviasen comestibles o lo que necesitasen. Algunos de los trabajadores tenían huerto y algún animal. Centrándose en la estación Linares-Baeza, en relación a su vida social, muchos de los trabajadores participaron en actividades teatrales. Formaron una compañía teatral en la que el Alcalde era el director. Respecto a las fiestas, gracias a los ferroviarios, se introdujo la de La Virgen del Rocío, que duraba unos dos o tres días, y aun hoy se sigue celebrando. En relación a la vida sindical, él era vocal sindical provincial del Sindicato Vertical, pero afirma que los sindicatos hacían lo que decía el Gobierno, pero eso sí, los obreros estaban más protegidos que ahora. De la Guerra Civil, recuerda los bombardeos del principio y del final de la misma. Debido a esto su familia menos su padre emigran a Santa Cruz de Mudela a casa de una tía suya. También existían refugios para las personas que se quedaban. Recuerda las represalias políticas que hubo al terminar la Guerra y las depuraciones. Baeza fue una estación de castigo para todo aquel del que se sospechaba que fuese republicano. Las opciones eran: encarcelarlo, despedirlo o trasladarlo. Pasado un tiempo algunos de los despedidos fueron readmitidos.
Cuéllar Villar, Domingo (Entrevistador)